Existen lugares maravillosos en cualquier época del año, y Lorenea y el Parque de los Sentidos es uno de ellos. Lo descubrí el año pasado por casualidad y se ha convertido en uno de nuestros sitios favoritos a los que ir.
Lorenea está gestionado por una fundación (Varazdin) y tiene una propuesta increíble que convierte al espacio en un sitio aún más especial. Ellos mismos lo definen como un espacio de sostenibilidad social y medioambiental.
Para las personas que paseamos por ahí es un parque precioso, repleto de flores, plantas aromáticas e incluso música que despiertan todos los sentidos. Con una huerta ecológica enorme de la que puedes consumir los productos cogiéndolos tú mismo de la tierra.
En Primavera la explosión de color es espectacular, por eso que a finales de Marzo y principios de Abril el lugar se convierte en una peregrinación para las fotos de las comuniones, es muy divertido de ver :-).
Nosotras personalmente estamos enamoradas de Platera, una burrita que está embarazada y que ha sido entrenada para hacer terapia infantil. Es un auténtico amor, de hecho ya nos conoce y nos rebuzna cuando nos ve. Mi único sufrimiento es el poco respeto que tienen muchas personas a la hora de darle comida, he visto gente darle hasta galletas Oreo y a veces parezco yo la vigilante del parque dando explicaciones de lo que puede comer y de lo que no. Antes de dar de comer a un animal hay que informarse bien, un cólico en un equino, aparte de dolorosísimo, puede ser mortal.
Al estar pegado al aeropuerto se puede disfrutar del aterrizaje y despegue de aviones, es una auténtica experiencia.
El proyecto aúna la sostenibilidad ambiental con la sostenibilidad social pues la Jardinería y la Horticultura ecológica de Lorenea es llevada por personas en riesgo de exclusión socio-laboral.
A lo largo del año se realizan visitas guiadas a la escuela de sostenibilidad, oferta formativa dirigida a concienciar sobre el cuidado del medioambiente y la protección del entorno. Como ya he dicho, puedes adquirir productos de la huerta urbana ecológica cogiéndolos con tus propias manos.
Uno de los espacios que más nos gusta es la propia cafetería Lorenea, un edificio bioclimático que tiene un ambiente cálido en invierno y abierto en verano, dónde todos los productos son ecológicos y cuenta también con mesas a la terraza y delante del parque infantil, lo que es ideal si vas con niñ@s. En invierno puedes sentarte tranquilamente a leer en una de las mesas que hay delante de la chimenea.
Lo que me demuestra este maravilloso espacio es que pueden crearse nuevas iniciativas que sean sostenibles y a la vez tengan un impacto positivo en el entorno. Esas son las nuevas formas de empresa que deberían crearse, en mi opinión. En forma de empresa y a nivel personal, es importante ser conscientes del impacto que genera todo aquello que hacemos, comemos, los productos que utilizamos…No es suficiente con quejarse de que fuera «todo está mal» si nosotros somos los primeros que contaminamos el entorno con nuestros pensamientos, lo que comemos o los productos que utilizamos. Los cambios siempre deben ir de dentro a afuera ¿no creéis?
¿Conocéis más sitios como este o parecidos? Me encantaría conocer más propuestas sostenibles alrededor del mundo.
¡Gracias por pasaros!
El post Platera y nosotras (Lorenea) ha aparecido por primera vez en Miss Red Cape