Más de dos años sin comprarme nada de ropa, perdón, casi nada de ropa porqué he necesitado un pijama y algunas camisetas interiores, nada glamouroso pero ropa al fin y al cabo. Y sigo viva. De hecho creo que más viva que antes. Y quizá pasada de moda pero feliz y encima deshaciéndome de más y más prendas. Sintiendo que cada objeto que acumulas te roba espacio y energía y no deja sitio para crecer, ni para ponerte lo que ya tienes, es una especie de confusión externa que se refleja en el interior.
Y yo pienso: si para mi hija he aplicado la máxima de “menos es más” para sus juguetes, ropa etc, ¿por qué no para todos?. Y esa es la cuestión: se empiezan pequeños cambios que se convierten en grandes cambios y que afectan a toda la familia, en positivo. Estos peques no dejan de ser un precioso (a veces molesto) espejo.
Y me sigue gustando la ropa; igual que la belleza, el paisaje, la educación, los animales, sacarme fotos con prendas que considero bonitas…pero eso no significa tener que consumir y consumir y consumir o estrenar y estrenar. En esto, como en el resto de aspectos de la vida, hay que probar a hacerlo diferente, ponerle un poco de imaginación y creatividad. Intentar hacer las cosas diferentes, probar…La comodidad tiene un precio MUY alto.
Estoy vendiendo mucha de mi ropa en Chicfy y otra mucha la estoy llevando a rastros y ahora encuentro prendas que adoraba y que no podía ni ver entre tanta multitud, como esta falda y este jersey, de mis colores favoritos siempre, los que me conocéis ya lo sabéis.
Y cuánto más vacío está mi armario, más vacío necesito que esté y más libre me siento.
Y ahora, es una muy buena época. En las escuelas Waldorf se hace la LIMPIEZA DE LA PRIMAVERA, momento en el que se limpia la escuela, se lavan las telas, trapos y toallas, todo se saca al sol y nos desprendemos de todo aquello que ya no usamos, ya no nos sirve o ya no necesitamos.
En casa es un buen momento para revisar todos los armarios y dar una nueva vida a aquello que ya no tiene cabida en nuestra vida.
De la misma forma que muchas cosas que ya no nos quedan igual, no nos caben o hace más de un año que ya no nos ponemos, no tiene sentido guardarlas en el armario “por si acaso”. La vida provee y la mayoría de las veces te das cuenta que o no lo echas de menos o que cuando lo necesitas, aparece por otro lado, o ambas dos. Es bueno aprender a soltar.
Aprovechad esta primavera precoz, para soltar todo aquello que ya no os aporta nada. Quizá otra persona lo está esperando, lo necesita… Vaciar nuestras casas y hogares, incluso nuestros sentimientos hará que podamos viajar mucho más ligeros y con la mente más clara. Porqué se empieza por la ropa y se termina por esa relación o esa forma de enfrentarme a las cosas que ya no tiene cabida en mi “armario” personal.
¡Feliz feliz feliz entrada de Primavera!
El post Más de dos años ha aparecido por primera vez en Miss Red Cape
I love all these shades of red together!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Thanks Karen!I love it too!:-)
Me gustaMe gusta