Y yo me pregunto: ¿si la comadrona te da el alta y la pediatra te atiende diez minutos, con suerte, cómo sabes en qué etapa está tu bebé o qué debes hacer para su mejor desarrollo? Leer libros. Bueno, este tema es complicado porque, basándome en mi propia experiencia, muchos libros no son generales sino que son manuales estrictos de diferentes «religiones» de crianza. Es difícil dar con un libro que no quiera adoctrinarte y llevarte a su «radical, definitivo y únicamente válido» método. Evidentemente hay que seguir el sentido común pero a veces se está tan cansado que se convierte en el menos común de los sentidos que se mantienen en pie.
Tengo la suerte de tener cerca a mi amiga Patricia que es pedagoga, educadora… y que me ayuda en las siguientes fases de Violette, cerca de los cuatro meses ya le viene bien estar todo el rato que esté despierta en el suelo, jugando, ejercitando los músculos y practicando eso del girarse. Así que he habilitado «su habitación» (duerme con nosotros, así que, su futura habitación) con mantas en el suelo, mi portátil, libreta, manualidades varias, plancha….y mientras ella juega yo aprovecho para hacer mis cosas, me tumbo en el suelo con ella, le doy el pecho…¡ha sido genial!Todo acompañado de buena música.
Esta semana me he propuesto hacer cada día una cosa distinta a como la hago habitualmente con Violette, y he obtenido resultados increíbles, sobretodo a nivel personal mío, de sentirme un poco más liberada en muchos aspectos porque a menudo «nos encogemos» haciendo siempre lo mismo o lo que nos ha funcionado en un momento dado, estamos tan cansados que nos da miedo cambiarlo, pero merece la pena.
Violette se adapta a todo, es feliz y se ríe un montón, aunque no es una gran bella durmiente y eso se hace muy duro pero a la mañana siguiente te sonríe y se vuelve a activar nuestro enamoramiento mutuo.
Crece rápido y feliz y yo me alegro de poder decir que me voy acordando de cada momento y etapa hasta el momento porque lo estoy viviendo con plena conciencia.