No hay que vivir la vida de color de rosa, no hay que camuflar las cosas que pasan, pero tampoco hay que dejar de ver que hay verdes, amarillos y rojos, hay gente haciendo cosas geniales, o simplemente haciendo cosas. Hay que seguir andando y, a pesar del gris, a veces uno tiene que vestirse de rosa para hacer este camino un poco más alegre. No pasa nada.
¡VIVE LA VIE EN ROSE!
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Encontrando la belleza y la creatividad en cada momento 