Hoy he tocado el cielo. Algo me hizo torcer a la izquierda. Las ganas de estar sola y no cruzar ni siquiera un «hasta luego» o un simple gesto amable con la cabeza. Y de repente…el cielo…Miles de copos de nieve en forma de pétalos. Esto me es familiar. Esto me suena. Yo he estado aquí antes. Una emoción que recorría todo mi cuerpo.¡Me acuerdo!Es como retroceder en el tiempo…Pero ¿hasta cuándo?…
El cielo debe ser parecido a esto – pensé.
Y ya no tengo miedo a morir…Ya he estado allí. O aquí.